Levanto el capó y veo una placa que ya dice mucho. Como todas las creaciones de AMG, la firma el operario que ha ensamblado el motor, en este caso de este familiar… digo, deportivo. O ambos a la vez. La confusión viene dada por el formato. Estoy ante una carrocería wagon, lo que Mercedes-Benz llama Estate en catálogo. Pero varios detalles exteriores, y sobre todo lo mucho que esconde en sus entrañas llevan implícito el sello de las mencionadas e inequívocas siglas.
Porque, para empezar a saber qué tenemos entre manos, hablamos de un automóvil que alcanza los 100 km/h desde parado en solo 3,6 segundos. Un registro al alcance de muy pocos en el mercado, y más en la órbita de lo que consideraríamos un flamante súper deportivo. La división deportiva de la marca de la estrella ha demostrado con creces que sabe hacer excelentes productos así, léanse los Mercedes-AMG GT y SLS, que rendía tributo al mítico ‘alas de gaviota’. Su trabajo también atañe a versiones ‘radicalizadas’ de modelos convencionales, como este E Estate que se sitúa a la cabeza entre los de su clase.
Dentro de esta gama es la propuesta intermedia, si bien no se puede usar aquello de “la más sensata y equilibrada”. Por debajo tiene al E 53 4MATIC+ (V6 de 435 CV) y por encima al E 63 s 4MATIC+ (tremendo V8 potenciado a 612 CV). Pero las cifras de nuestro protagonista son suficientemente impresionantes como para acudir al término sensatez.
Sus credenciales
Centrándonos en nuestro E 63 4Matic+ Estate, con su imponente ocho cilindros sobrealimentado por dos turbos, entrega 571 CV y un par estelar de 750 Nm entre 2.250 y 5.000 rpm. Con ello, y con una dinámica en la que más adelante entro en detalle, satisface al cliente más exigente. Además, también integra al usuario que quiere correr, sí, pero con un grado de confort y funcionalidad elevado. Ahí el E Estate es un familiar en toda regla.
En lo que respecta al habitáculo parece claro que se impone la propuesta más pragmática y tecnológica con los ocupantes, más que la deportiva. El interior es magnífico por amplitud (aunque el gran túnel trasero de la transmisión deja poco margen para un tercer pasajero en la zona posterior), y en especial el maletero da muestra del potencial del vehículo a la hora de viajar a plena carga. Sus 565 litros, distribuidos en un profundo hueco, son ampliables a un máximo de 1.820 litros abatiendo respaldos.
Más aún, el espectáculo visual de este Mercedes-Benz de cara al conductor no deja indiferente. La impecable calidad de fabricación se materializa con un equipo de control abrumador. Dos enormes pantallas de 12,3 pulgadas, interpuestas una a continuación de la otra a modo de televisión ultra panorámica, elevan la categoría premium y de vanguardia de la última Clase E.
En adición a su concepción premium, AMG deja su estampa en forma de varios elementos decorativos. El volante, achatado en la base, incluye su logo, igualmente presente en la tapa situada en la consola central. Otros detalles deportivos son los pedales, asientos (de aspecto más agresivo a los estándar, pero todavía cómodos) y la decoración en diseño fibra de carbono brillante que viste el salpicadero. Hay otros componentes que no se ven y que, junto al motor, elevan el tono de un producto que deja a un lado la faceta familiar para convertirse en todo un deportivo.
En marcha camufla su enorme envergadura
Se ve rápidamente al arrancar. Mercedes AMG dota a todos sus productos de un sonido de escape muy característico, rabioso y que petardea de forma escandalosa sobre todo en modo de conducción deportivo. Y este E no es ajeno a dicho perfil. Además, la facilidad con la que el V8 sube de vueltas activa de inmediato nuestro lado más irracional. Da gusto pisar un acelerador con tanta reserva de potencia, inacabable, que facilita adelantamientos vertiginosos y una sensación de poder absoluto.
A ello contribuye una caja de cambios 9G-TRONIC AMG SPEEDSHIFT MCT de nueve relaciones. Las hay más rápidas, pero este cambio permite aprovechar adecuadamente y con celeridad cada unidad de fuerza.
Conducción emocional
La ‘doma’ de tanta caballería es asumible, pues las reacciones del coche son predecibles. Pero con una importante puntualización: la tracción a las cuatro ruedas está calibrada para que en la práctica se sienta más como un automóvil a propulsión. Circunstancia que a la postre aumenta la diversión y las sensaciones deportivas al volante. No quiero decir que sea nervioso o que vayamos a ‘ir de lado’, ilógico en un producto como este destinado a la calle, sino que la zaga se insinúa al solicitar potencia.
Por este motivo, y porque la suspensión (de tipo neumático, de fábrica) tiene una firmeza evidente, el Clase E firmado por AMG añade un tono distinto a sus hermanos de gama, con una sonoridad de rodadura más elevada y una moderada pérdida de confort general. Ahora bien, con el buen guiado que ofrece la dirección, el enorme aplomo que facilita la puesta a punto deportiva del bastidor(traza curvas con un agarre sorprendente) y el sublime motor, este familiar tiene más razones para convencer que para disuadir.
El precio, cómo no, también refleja su exclusividad, con un cifras tan prohibitivas como sus prestaciones. El Mercedes-AMG E 63 4MATIC+ Estate es, en definitiva, mucho más que un familiar. Conductores sosegados, abstenerse.
Ficha técnica del Mercedes-AMG E 63 4AMATIC+ Estate
TIPO DE MOTOR | Gasolina, 8 cilindros en V, biturbo |
CILINDRADA | 3.982 cm3 |
POTENCIA | 571 CV a 5.750 rpm |
PAR MÁXIMO | 750 Nm entre 2.250 y 5.000 rpm |
V. MÁXIMA | 250 km/h |
ACELERACIÓN | 3,6 s (0 a 100 km/h) |
CONSUMO | 10,8 l/ 100 km (mixto) |
MEDIDAS | 5.005/1.907/ 1.474 mm |
NEUMÁTICOS | 265/ 40 ZR 19 (del.); 295/35 ZR 19 |
PESO EN VACÍO | 1.985 kg |
MALETERO | 565- 1.820 l |
PRECIO | 139.300 € |
GAMA DESDE CUOTA RENTING | 56.400 € 2.624 €/mes |
LANZAMIENTO | Julio de 2017 |
Equipamiento del Mercedes- AMG E 63 4AMATIC+Estate
De serie: sistema PRE-SAFE; control de ángulo muerto; modos deconducción Dynamic Select; control de velocidad de crucero; suspensión neumática AMG AIR BODY CONTROL; diferencial autoblocante mecánico en eje trasero; llantas AMG de 19 pulgadas; escape deportivo AMG; faros adaptativos Multibeam LED; portón trasero eléctrico;asistente de aparcamiento con cámara de 360º; asientos deportivos eléctricos y calefactables; tapicería de cuero napa AMG; instrumentación digital; navegación ComandOnline con pantalla de 12,3 pulgadas; Head-up display; y Apple CarPlay y Android Auto.
Opcional: pintura metalizada (1.181 €); paquetede memoria de asientos (1.520 €); asientos dinámicos con masaje (2.912 €) y climatizados (1.106 €); sonido surround Burmester (de 1.554 a 6.652 €);
paquete asistencia a conducción: incluye control de crucero adaptativo con asistente de dirección, frenada de emergencia y asistente de cambio de carril, entre otros (2.837 €); llantas forjadas AMG (4.181 €).