AEAC-ITV, la asociación que aglutina los centros de ITV de nuestro país ha alertado en un comunicado de prensa que hasta el 40% de los vehículos que circulan por nuestras carreteras lo hacen con la ITV caducada. El problema no es nuevo. Pero el Estado de Alarma, el confinamiento y las moratorias con nuevos plazos generadas por el Gobierno para los vehículos que cumplieron la ITV mientras los centros estuvieron cerrados (un plazo que concluyó el pasado 2 de marzo) ha duplicado el número de vehículos que circulan sin este examen en vigor.
Desde la propia asociación apuntan a la necesidad de que los vehículos cumplan con este trámite. Representa un examen por el que se controlan el buen estado del vehículo. Aseguran, permite salvar un buen número de vidas al año. Además, recuerda que, en caso de ser detectados en un control, la multa podría ser de 200 o de 500 euros.
Y, no solo eso, se expone a que, en caso de accidente, el seguro no cubra los gastos generados en el siniestro.
El 14 de marzo de 2020 se decretó el Estado de Alarma en nuestro país y, con este, un confinamiento poblacional para detener el avance de los contagios por el Covid-19. Con este se decretó el cierre de toda actividad que no fuera prioritaria. Y los centros de las ITV fueron uno de los que se vieron obligados a cerrar.
El confinamiento duró varios meses, la salida fue progresiva y no fue igual en todas las comunidades autónomas, algo que se repitió con las ITV. Para retomar la normalidad en la actividad de la ciudadanía, evitar las colas en estos centros de inspección y el riesgo a que hubiera vehículos que pudieran ser objeto de multas, el Gobierno decretó una serie de moratorias y plazos para que estos vehículos acudieran pasar este examen.
Y, esas moratorias, se cumplieron el pasado 2 de marzo, por lo que ya no hay excusa que valga para no llevar la ITV en vigor.
Un dato que pronto llamó la atención de todo es que tras estas prórrogas, la vigencia de la ITV no sería de un año, sería inferior por lo que para 2021 habría que volver a superarla el mismo mes en que le venció en 2020, aunque la última inspección la hubiera posteriormente. Es decir, un vehículo al que le caducara la ITV en abril de 2020 y la superara en junio de 2020, este año tendría que volver a pasarla en abril de 2021.
Otro detalle que ha inducido a aumentar la confusión fue una sentencia del Tribunal Supremo del 31 de diciembre que anulaba este punto. Pero, a pesar de la esperanza de muchos, no tendría efecto retroactivo por lo que el caso antes expuesto se mantenía invariable, sin embargo, quien superara la ITV en enero de este año, no tendrá que volver a superarla hasta el enero de 2022. En este caso, su ITV tendrá una validez superior a un puñado de meses.