Ford es el único de los gigantes de Detroit que no necesitó ayuda del Ejecutivo de Obama y que en 2015 regresó a los beneficios. Ahora busca apuntalar el buen rumbo tomado. Para ello ha presentado una nueva estrategia para los próximos años que reportarán cambios en la estructura de la compañía, en su oferta de modelos y en el personal, aunque sobre estos puntos poco ha trascendido.
En cuanto a la oferta de productos, continuará con su apuesta por el mundo SUV, el que más ha crecido a nivel mundial en los últimos años, así como por los modelos que más imagen dan, como son los surgidos del departamento Ford Performance. Al mismo tiempo revela que podría dejar de fabricar aquellos modelos que menos beneficios den, por lo que podría haber alguno que esté en ‘peligro de extinción’.
Su búsqueda por la eficacia también implica a las fábricas. Tras el cierre de tres plantas en occidente desde 2013, ahora busca una mayor eficiencia en consumo de energía y agua, así como de las materias primas y personal. El objetivo autoimpuesto para la mejora de esta eficiencia es del 7%.
Continuará con su apuesta por el segmento SUV, con los próximos lanzamientos del Edge y la renovación del Kuga. No en vano es el segmento que más ha crecido en Europa en el último año. Continuará lanzando modelos de altas prestaciones, surgidos del departamento Ford Performance con nuevos modelos como un Fiesta que rondará los 200 CV. Y ahora llega el nuevo Ranger, un pick-up del que se espera un gran éxito a nivel internacional.
Ampliará la gama Vignale. Por el momento con un único modelo a la venta, el Mondeo, aunque próximamente llegarán también las versiones del S-MAX, Galaxy… Y lo mismo hará con las tecnologías híbridas, que se irán ofreciendo poco a poco en un mayor número de vehículos.
Más allá de la oferta de vehículos, Ford busca aumentar la relación con el cliente, mediante una nueva experiencia de compra en Ford Store, el nuevo tipo de concesionario que comenzó a abrir a principios del año pasado; la plataforma FordPass, que supone un asistente personal que ayudará en todas las necesidades que uno pueda tener con su vehículo; y nuevas soluciones de movilidad.
Ford ya ha presentado sus planes de conducción autónoma, contando ya con varias unidades que están realizando pruebas en condiciones de tráfico real y en carreteras abiertas.
Y para finalizar. Ha iniciado un programa de bajas voluntarias que según previsiones de la propia empresa, le permitiría ahorrar unos 200 millones de dólares, 185 millones de euros.